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JUGAR A SER NIÑO…

Friedich Nietzche, el excelso que pensador que cambió el pensamiento moderno, entre sus grandes creaciones, propuso lo que dió en llamar "Las tres transformaciones del espíritu": la del camello sometido a todo lo que le imponían aceptando los latigazos mansamente; la del león que reclamaba no recibir más golpes pero terminaba aceptándolos y el espíritu del niño, cuyo valor era imponer que no lo castigarán más creando los propios.

Hubo varios que fundamentaron el espíritu del niño, ¿quién podrá no reconocerlo? El sentimiento de los púberes ante las actuaciones del capitán Piluso, Carlitos Balá, el jamás olvidado Martín Kadaragián y sus Titanes, Cantinflas para los mayores tanto como aquellos sentimientos que despertaba Luis Sandrini con sus personajes inolvidables y hace poco tiempo, el Chavo del Ocho con todos sus personajes y en particular con "Ron Damón" aquel que siempre jamás pagaba la renta al Sr Barriga y recibía los bofetones de Doña Florida, o el amor imposible de la Bruja del 71.

Personaje central de las travesuras de la Chilindrina, el Chavo y Quico siempre dispuestos a no dejarlo cambiar la lamparita de la vecindad o a espiarlo cuando se equivocaba y trabajaba de zapatero.

Supo penetrarse en el sentimiento infantil en tal forma que "Patricia Ramos El gruñón mas encantador; cuando era niña quería meterme en el televisor para darle una paliza a Doña Florinda, por maltratar a Don Ramón! Jajajajajajajajaja! Las ocurrencias cuando se es niño", lo recuerda así en facebook, la red social utilizada por muchos de nosotros.

Byron Benavides cuando el muerto esta bien muerto recién quieren sacar trapitos al sol y lo denigran como le da la gana y sabe que no tiene defensa ni repercusión a la denuncia por que no lo hizo cuando estaba en vida al muerto dejenlo en paz o en algo le afecta don ramón como lo conocimos fue un actor que nos saco una sonrisa aún que estemos con alguna pena en la vida de alguien hoy lo llevamos como en el corazón un buen actor y compania", agrega en su lenguaje particular el mencionado.

Lo básico a nuestro juicio es que fueron capaces la compañía del Chavo a jugar a ser niños, quizás en un mundo en donde los adultos mandan a los niños a la guerra, los explotan sexualmente, comercializan con su salud vendiéndoles drogas y demás porquerías.

Jugaron a ser niños, jugar a ser niño, quizás sea la enseñanza de ese elenco provistos de la inocencia infantil y sus nobles creaciones.

Ser niño, creando sus propios valores, es seguramente la gran propuesta del Chavo del Ocho. Propuesta nada desdeñable que sería oportuno imitar…

 

 

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