3 de diciembre. El día nos remite a nuestros médicos. Por cierto, mucho y bueno para decir, desde tiempos coloniales hasta la fecha.
Por Maria Britos. La Epidemia de Fiebre Amarilla que se vivió en Buenos Aires en 1871, nos dan un ejemplo rotundo de entrega y solidaridad de nuestros próceres de bata blanca. Con formación académica y de grado, sirviendo al ideal médico y juramento hipocrático sirviendo a los ciudadanos, dejaron sus vidas entre otros los doctores: Adolfo Argerich, Manuel Argerich, Juan Ramón Vidal, Francisco Javier Muñiz, entre muchos héroes de nobleza y entrega inigualable.
Así, nos cabe tener médicos acreedores del Premio Nobel de Medicina como los Dres. Luis Federico Leloir, descubrió el papel de los nucleótidos (azúcares) y su protagonismo en la formación de hidratos de carbono o azúcares. Fundamental para diagnosticar la Galactosemia y otras enfermedades. La Galactosemia es una patología de origen congénito, la misma impide al organismo el proceso de metabolización de la galactosa (en azúcares simples) su acumulación en el organismo puede ser fatal sin un diagnóstico preventivo. César Milstein (1984), y los Anticuerpos Monoclonales: proteína de origen artificial creados en laboratorios para imitar el funcionamiento que les cabe a los anticuerpos naturales del sistema inmunitario. Su utilización es también para el diagnóstico de enfermedades, en especial cánceres de difícil identificación. Bernardo Houssay (1947) Premio Nobel en dos disciplinas: Medicina y Fisiología. Con el descubrimiento sobre el papel de la glándula hipófisis en la regulación del azúcar en sangre.
Y nuestros médicos rurales, figuras de entrañable valor y entrega en campo: Dr. Esteban Maradona. Médico Rural.
El Dr. Esteban Laureano Maradona nació el 4 de julio en Esperanza (Santa Fe) y falleció el 14 de enero de 1995 en Rosario. Cien años tenía nuestro apóstol de la Medicina. Y su legado es atemporal.
«El monte lo hechizó y Formosa lo retuvo 50 años. Él dedicó su vida al servicio de comunidades indígenas y a los más desfavorecidos, defendió sus derechos y condenó injusticias. Allí encontró todo lo que necesitaba y las personas que necesitaban de él.
Sólo el indio incivilizado, sufriente y postergado valoró su increíble labor recordándolo a su muerte con la frase: » Dr. Maradona extrañar mucho». Bautizado como «Prognack», el Dr. Dios».
Estanislao del Campo, lo vio hacer sus tareas rurales al final de su vida.
Campesino, tipógrafo, escritor, médico. Investigador de la flora y fauna. Estudioso de los idiomas de los nativos del lugar. Hablaba todas sus lenguas. Hablaba con las plantas, que le daban su saber…hablaba quizá con Dios… Fisonomía y postura se igualaban porque él, sólo él era Prognack. Su Prognak, su Dr. Dios… También lo recibió entre indios y pobres lo atrapó con su corazón virgen, ávido de dar su conocimiento y verlo sanar. Conocer otra vida, donde nada es certeza,
Dr. Ramón Gómez Carrillo.
Investigador de las herniaciones ocurridas en el cerebro y ocurridas en sus cisternas (hernias cisternales).
Síndromes que ocurren tras un traumatismo o conmoción cerrada cerebral, Post conmociónales.
Descubrió la enfermedad de Papilitis aguda epidémica.
El Dr. Ramón Gómez Carrillo Carrillo y sus investigaciones. Fue uno de los fundadores de EMESTA, nuestra primera fábrica nacional de medicamentos, para el abastecimiento de remedios a bajos precios. Impulsor de los laboratorios nacionales.
Le cabe al Dr. Ramón Gómez Carrillo (neurocirujano), nacido en Santiago del Estero la investigación de un flagelo de los años 45, el paludismo que erradicó. Sobre el Mal de Chagas-Massa. Infestadas que eran las zonas ribereñas de nuestras provincias como Santiago del Estero, Chaco, con la vinchuca anidada en los techos de paja de los ranchos. Combatió el mal endémico con manos y obra: limpieza y renovación de techos donde anidaba el insecto,
Con método simple y económico: limpiar con agua y cal cada rincón y así evitar la picadura del vector. La particularidad de la vinchuca es que de noche se desprende de su hábitat y deja sus huevos en la zona de los párpados. De allí esa picadura – infección, llega a la zona coronaria donde queda alojada. Es aún de difícil tratamiento.
Hizo campañas de esclarecimiento y praxis, las manos en la masa: agua, cal, limpieza y de nuevo: agua, cal, limpieza, y esclarecimiento de los porqué y cómo. Así logró que se fue propagando por cada pueblo, creaba las postas sanitarias al servicio de los pueblitos o caseríos visitados, él y muchos otros, formaban el ejército contra el implacable enemigo: la vinchuca. Que, en rigor, sigue produciendo pacientes de todas las edades.
Dr. René Favaloro. Cirujano Cardiovascular. Médico Rural.
Catedrático. Mítico creador del By Pass Coronario entre otras especialidades.
Especialista en cirugía de By Pass aortocoronario. Reconocido por su especialidad en la Universidad de Tel Aviv, (Israel), que lleva el nombre de nuestro médico.
La operación data de 1967 y es reconocido como uno de los 400 inventos mejores de la humanidad.
El Dr. Favaloro es quien expandió la cirugía cardiovascular por todo el mundo.
Durante años fue catedrático y médico cardiólogo del Hospital de Clínicas, formando un equipo de excelencia y formación reconocida en el mundo.
De allí pasó a la creación de la Clínica Favaloro del que fue su Director hasta su muerte (suicidio) en 19
De su estadía en Estados Unidos, en la Clínica Cleveland de Cardiología, logró una fama inmediata e internacional de la cual hasta la fecha se ufanan los profesionales que con él realizaron sus intervenciones a corazón abierto.
Danton Cooley, entre ellos fue uno de sus colaboradores, admirador de su colega, y su franca personalidad sin tamices, la misma le sirvió para ganarse amigos, admiradores y feroces enemigos, mediocres ante su grandeza.
Millones de personas viven gracias a su bypass y él en un grito ostentoso rompió el suyo con un balazo…
Su legado, lo humanístico y político, científico, lo sigue posicionando como el médico de La Pampa, el de Jacinto Arauz, el mismo que anduvo las calles del barrio El Mondongo, en La Plata, y se graduó en la Facultad de Medicina de La Plata, la UNLP. Uno de sus libros, Memorias de un médico rural, sigue editándose, una forma más de tenerlo. Su compromiso y equidad siguen acompañando su memoria.
Dr. Alfredo Grande. Médico psiquiatra.
Egresado de la Facultad de Medicina de la U.B.A.
Jefe de Cátedra de Psicología Médica de la Escuela de Kinesiología de la misma.
Psicoanalista egresado de la Escuela Argentina de Psicoterapia para Graduados, donde actualmente es Profesor de Teoría Psicoanalítica.
Dedicado de lleno desde siempre a abrir huellas en caminos no transitados para el crecimiento humano donde el humor tiene parte insoslayable y lo muestra como actor, director, docente en las facultades de Psicología de las Universidades Nacionales de Rosario, Mar del Plata, y La Plata en curso Psicoanálisis Implicado. Redactor de Pelota de Trapo (Agencia de Noticias), Alfredo Grande es un imprescindible y a él nos remitimos en parte de una entrevista.
La Fundación Juanito en Colegiales lo muestra en su salsa más humana y cercana al otro, un otro que también puede ser feliz. Sin edad.
Creando lazos de empatía, de saberes compartidos también sabores porqué no. Lo muestran desacartonado, un hombre que cuelga el guardapolvo para jugar un picado con niños, para cocinar y enseñar sobre el desafío de este tiempo, que aún podemos cambiar una sociedad que va necesitando de amor y juego, de abrazo y choripán en una ronda infinita donde la inclusión es el boleto que nos llama a vivir la aventura de humanizar el concepto de seres humanos, y deja de ser «la gente» y convertirse en un nosotros perentorio.
ALFREDO GRANDE qué más podemos agregar…