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Bienvenida, nieta 139: una verdad que resiste al tiempo

Por Emilia Viaggio

En un emocionante anuncio, las Abuelas de Plaza de Mayo dieron a conocer la restitución de la identidad de la nieta número 139. Se trata de la hija de Noemí Beatriz Macedo y Daniel Alfredo Inama, ambos secuestrados por la dictadura cívico-militar en noviembre de 1977. Este acto de justicia se realizó en el Espacio Memoria y Derechos Humanos (exESMA), un lugar simbólico de resistencia y memoria colectiva.

 

Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas, celebró el encuentro destacando que “la verdad sigue saliendo a la luz, a pesar del negacionismo y los intentos por borrar la memoria”. Hace apenas un mes, también se anunció la restitución del nieto 138, hijo de Marta Pourtalé y Juan Villamayor, desaparecidos en 1976.

 

El acto estuvo cargado de emociones y reflexiones. Ramón Inama, hermano de la nieta 139, expresó entre lágrimas: “Pensamos que el caso estaba cerrado, pero Abuelas nos demuestran que nunca se pierde la esperanza. Hoy sabemos quién es, y eso nos devuelve parte de nuestra identidad colectiva”.

 

Mientras tanto, figuras como Horacio Pietragalla Corti y Miguel Santucho, nietos restituidos, enfatizaron la importancia de seguir defendiendo las políticas de Memoria, Verdad y Justicia. “Este es un logro colectivo”, recordó Santucho, llamando a la sociedad a mantener vivo el compromiso.

 

Por su parte, Juan Grabois invitó a la acción: “Salgamos de las redes y volvamos a encontrarnos en la calle. Los pueblos que luchan siempre vuelven”. Una invitación que resuena en medio de un contexto político donde persisten discursos negacionistas.

 

A medida que el tiempo avanza, la urgencia de las Abuelas también crece. Buscarita Roa, vicepresidenta de la organización, recordó con firmeza: “Quedamos pocas, pero confiamos en que las futuras generaciones continuarán esta búsqueda”.

 

Este nuevo capítulo de lucha y resistencia no solo restituye la identidad de una persona, sino que fortalece la memoria de un país que insiste en no olvidar. Porque, como recordaron las Abuelas, la búsqueda de la verdad es un acto de amor y justicia que nunca se detendrá.

 

@abuelasdifusion

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