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BREVE INTRODUCCIÓN A DON CORNELIO SAAVEDRA Y SU EPOCA

¿Quién era ese militar un tanto controvertido que amaneció en la historia tras la Semana de Mayo? Nos encontramos con una biblioteca que nos narra sus enfrentamientos con Mariano Moreno y las ideas europeas pero, a su vez, también nos encontramos con un personaje inserto en las cosas criollas y apoyado por los hombres de tierra adentro.

De todos modos, tanto Cornelio Judas Tadeo Saavedra –nos dice el nombre completo el historiador Felipe Pigna- se podría definir al Presidente de la Primera Junta de Mayo como un hombre particular e incluso, si se nos permite- un tanto controvertido.

De hecho, una mirada global del Siglo XIX, si nos proyectáramos a esos años, no resulta difícil darse cuenta que con el advenimiento de Juan Manuel de Rosas y los caudillos del interior no triunfaron precisamente los ideales de Castelli, Monteagudo, Moreno y Don Manuel Belgrano. Todo lo contrario, precisamente.

Ni está bien ni mal. Es tan sólo un dato que arrojan los tiempos pasados.

Nos dice Felipe Pigna:

“Cornelio Judas Tadeo Saavedra nació en la Villa Imperial de Potosí el 15 de septiembre de 1759. Las difíciles condiciones climáticas de aquella zona llevaron a la familia Saavedra a regresar a Buenos Aires, de donde era oriundo el padre, Don Santiago de Saavedra.

Cornelio cursó estudios en el Real Colegio de San Carlos destacándose por su inclinación por la filosofía. Pero no pudo concluir sus estudios y tuvo que dedicarse a las tareas rurales. En 1797, inició su carrera en la función pública como regidor. Su destacada actuación le valió, dos años más tarde, la designación de procurador y, en 1801, la de alcalde de primer voto” (Fuente: www.elhistoriador.com.ar)

De hecho y si también mirásemos aquellos hechos de los primeros gobiernos patrios nos encontramos con un Buenos Aires dominante y dominador e incluso con pretensiones de domesticar las pretensiones de otras provincias y ni hablar de Don José Gervasio de Artigas o Don Manuel Belgrano y de ciertas políticas del Padre de la Patria, Don José de San Martín con sus ideas libertarias, acriolladas al máximo, propuestas de reforma agraria, respeto irrestricto a todo habitante del suelo patrio e incluso, sus ideales de abolición de la esclavitud y de respeto al originario de estas tierras antes de la conquista salvaje de 1492 donde los españoles se llevaron puestos nada menos que quinientos mil cabezas de los aborígenes que cultivaban sus tierras, amaban al Rey Sol y a la Madre Naturaleza.

En sus memorias, cita la fuente citada, Cornelio Saavedra dirá:

«Con las más repetidas instancias, solicité al tiempo del recibimiento se me excuse de aquel nuevo empleo, no sólo por falta de experiencia y de luces para desempeñarlo, sino también porque habiendo dado tan públicamente la cara en la revolución de aquellos días no quería se creyese había tenido particular interés en adquirir empleos y honores por aquel medio. A pesar de mis reclamos no se hizo lugar a mi separación. El mismo Cisneros fue uno de los que me persuadieron aceptase el nombramiento por dar gusto al pueblo. Tuve al fin que rendir mi obediencia y fui recibido de presidente y vocal de la excelentísima Junta (…) Por política fue preciso cubrir a la junta con el manto del señor Fernando VII a cuyo nombre se estableció y bajo de él expedía sus providencias y mandatos».

La figura del Presidente de la Junta de Mayo, de esto se trata esta página, nos explica algunos hechos de nuestra historia: el predominio del puerto de Buenos Aires que es un punto vital en todo nuestro desarrollo como Nación sobre las provincias y las luchas que serán vitales a lo largo de las décadas posteriores a 1810.

Una historia si se quiere  controvertida de criollos y  no criollos. La lucha de los Martín de Güemes, allá en la bella tierra Salteña, de los caudillos como el Chacho Peñaloza a quien aún se le debe el reconocimiento nacional como un General de la Patria, Felipe Varela, Juan Manuel de Rosas, Facundo Quiroga y los demás hombres que pretendieron un país para los argentinos.

¿Quién ganó esa gran batalla?

Obviamente, los triunfadores de Caseros que dominando el puerto impusieron sus directivas al resto de las Provincias de nuestro país.

Pero ésta es otra historia que alguna vez daremos parte.

 

 

 

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