Aún en forma abundante los habitantes de la Ciudadde Buenos Aires tenemos el Día cuanto se nos podría ocurrir, muchos válidos por supuesto e incluso, la palabra amistad hasta se la bardea con estupideces comerciales aquella que sugiere “Consejo de Amiga: pasate a telecentro” (una escoria comercial en primera y en última instancia porque la amistad, se debe decir, es mucho más que la utilización desmadrada del término)
Y sin embargo no menos válido es el sentimiento cuando se vive en el otro, con el otro o cuando superamos el yo para convertirnos en el nosotros.
“En la Argentina, el Doctor Enrique Ernesto Febbraro, oriundo de la ciudad bonaerense de Lomas de Zamora (que en mérito a su iniciativa es la Capital Provincial de la Amistad por decreto municipal y además sede de la Asociación Mundial para el Entendimiento), profesor de psicología, filosofía, historia, músico y odontólogo y socio fundador del Rotary Club del barrio San Cristóbal y del barrio Once de la ciudad de Buenos Aires, creó el Día del Amigo después de enviar mil cartas a cien países de todo el mundo (de las cuales recibió 700 respuestas) luego de ver que, al alunizar el Apolo XI el 20 de julio de 1969, por una vez en la vida toda la especie humana estaba unida”, podemos leer en www.wikipedia.org.ar y también podemos decir que es esto y también mucho más.
Es jugarse por el otro que también es jugarse por causas comunes.
“A partir de la muerte del humorista gráfico y escritor argentino Roberto Fontanarrosa ocurrida el 19 de julio de 2007, apareció una propuesta, difundida por una cadena de correo electrónico, de cambiar la fecha. Este cambio llevaría el Día del Amigo en Argentina al 19 de julio, aniversario de la muerte del famoso humorista. La justificación del cambio que consta en dicho mensaje considera que el motivo de festejarlo el 20 es una “historia ajena” y que celebrarlo el 19 sería un homenajear a un personaje que “hizo pasar momentos felices, emocionar, reír y reflexionar” a muchas personas”
Amigo son aquellos que se protegen mutuamente enriqueciéndose por tal. Lo vemos en la mismísima ciudad de Buenos Aires cuando una persona en situación de calle duerme abrazado con su perro entregándose calor mutuamente en épocas invernales.
Hace unas semanas leíamos en otro medio que un hombre se negó ir a un parador nocturno porque no podía dejar solo a su perro en horas tan frías: la vivencia de la amistad en este caso es vivencial, es pedagógica, es aleccionadora.
“En 2007, otra propuesta impulsada por el escritor y periodista César Fuentes Rodríguez y difundida a través de cadena electrónica, impugnó severamente los motivos para el 20 de julio aduciendo que la llegada a la Luna y otros pretextos sólo representan una especie de concordia humana abstracta que está muy lejos de los valores propios de la verdadera amistad entre amigos, y propuso el 24 de julio como Día Del Amigo, por ser el día del nacimiento de Alejandro Dumas, creador de la novela de tradición y fama internacional Los Tres Mosqueteros cuyo tema central es la amistad”
El Día del Amigo, veinticuatro horas que también sirvieron para debatir como nos lo muestra el portal Wikipedia y, pensando en positivo, tanto debate significa que no es una fecha más y tal vez se pudiera consolidar con aquel gesto de Jesús que pagó por los pecados cometidos de los mortales pero haciéndose eco de la expresión “Todo hombre es mi hermano” y quizás también de la expresión del rabino Ricardo Goldman “Dios nos ha hecho hombres, el desafío es ser personas”.
De una u otra forma con lo expresado hasta aquí y a no muchas horas de un nuevo acontecimiento, hacemos votos para que este Día del Amigo pueda ser posible trasladar el yo al nosotros…