La Ciudad de Buenos Aires se suma a la campaña global «Julio sin Plástico«, una iniciativa de la Plastic Free Foundation que busca reducir el uso de plásticos de un solo uso y aumentar la conciencia sobre la contaminación ambiental. Durante todo el mes de julio, la Subsecretaría de Ambiente estará recolectando «Botellas de Amor» en los Puntos Verdes Móviles.
Según las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP, por sus siglas en inglés), la humanidad produce más de 430 millones de toneladas de plástico cada año, de los cuales dos tercios son productos de corta duración que luego se transforman en residuos.
Las «Botellas de Amor» son botellas plásticas llenas de otros plásticos difíciles de reciclar, como envoltorios de alimentos, palitos de chupetín y cepillos de dientes. Al llenar estas botellas con plásticos de un solo uso, se transforma el material en «madera plástica» que se utiliza para fabricar mobiliario urbano y otros productos. Este proceso no solo ayuda a reducir la contaminación plástica, sino que también fomenta la reutilización y el reciclaje, contribuyendo a un planeta más limpio y sostenible. Llevar las botellas a los Puntos Verdes Móviles según el cronograma habitual es una manera simple y efectiva de participar.
El plástico es uno de los materiales más dañinos para el medio ambiente. Su descomposición puede tardar cientos de años, y durante ese tiempo, libera sustancias tóxicas que contaminan el suelo y el agua. Ser conscientes de nuestros consumos y optar por alternativas reutilizables es crucial para minimizar nuestro impacto ambiental. Participar en iniciativas como esta no solo ayuda a reducir la contaminación, sino que también promueve una cultura de responsabilidad y cuidado por nuestro entorno.
Además, la Ciudad ofrece otras recomendaciones para reducir el uso de plásticos: usar botellas reutilizables, optar por bolsas de tela y evitar cubiertos desechables. Los vecinos que colaboren en la campaña también tendrán la oportunidad de participar en un sorteo para ganar una experiencia en la Reserva Ecológica Costanera Sur.
Iniciativas como esta no solo abordan el problema de la contaminación plástica, sino que también nos invitan a reflexionar sobre cómo nuestras pequeñas acciones cotidianas pueden contribuir significativamente a la protección del medio ambiente.