Algunos hablan del espíritu navideño: ¿Qué es el espíritu navideño sino unos cuantos valores a los que se debería priorizar?
Uno de ellos, como decimos siempre, es el AMOR pero en concreto: Amar es ayudar, es marchar juntos hacia un mundo más nuestro.
Donde todos tengan acceso al agua potable, a la vivienda, al trabajo y a la salud.
Es dirigirnos hacia un mundo sin tabúes: ¿En que cambia el mensaje del cristianismo si Jesús y María Magdalena hubiesen sido una pareja y de acuerdo a la voluntad de ambos, fornicaban las veces que tenían ganas?
¿Qué es el amor sino el NOSOTROS?
Es construir un mundo que se pueda discutir el celibato, la homosexualidad e incluso el aborto por causas como por ejemplo la violación de la mujer.
Es terminar con los Totem que otros construyen para dominarnos.
Jesús jamás justificaría que a los que menos tienen se los amontone en un rincón y a los poderosos se les entregue los mejores lugares.
Escrito está LA OPCIÓN PREFERENCIAL POR LOS POBRES en las Escrituras, tanto antiguo y nuevo Testamento.
Decenas de veces, cientos de veces los que menos tienen son los privilegiados por los profetas del Antiguo Testamento y qué decir en el Nuevo?
Alguna vez el CRISTINISMO TRASCEDENTAL que es el que sigue el mensaje de Jesús será una realidad. Alguna vez las palabras de Francisco I serán seguidas por la sociedad mundial en su conjunto; alguna vez serán priorizado terminar con el hambre por sobre las armas.
Alguna vez concluyendo, «A NADIE LE ES LÍCITO EL USO INDIVIDUAL DE LOS BIENES CUANDO A LOS DEMÁS LES FALTA LO MÍNIMO PARA SUBSISTIR» (Paulo VI, «Desarrollo de los Pueblos»
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