La presente nota es un homenaje a quien habitó este mundo para servir y no para ser servido; a quien vivió por el otro, que es la mejor manera de vivir para si.
Muy poco le importó las comodidades del mundo urbano. Su misión era otra: atender al necesitado de salud, atenderlo en donde las corporaciones de la salud no los atiende por la sencilla razón que no es rentable hacerlo.
Por su práctica no adhirió a las dos doctrinas gemelas sino que por la misma adhirió a la filosofía del amor, la cual nos enseña que «TODO HOMBRE ES MI HERMANO». Para el médico Dios allá donde no existen comodidades, donde todo se hace al pulmón, los nativos fueron sujeto histórico no meramente predicado utilizados para las más insólitos delirios.
Este video es un ejemplo de un hombre que no declamó por el hombre nuevo sino que propuso ese hombre nuevo desde el servicio, desde la solidaridad que es mucho más que el recitado de formilismos.
Tanto fue su trajinar, su ejemplo, que dejó una huella imborrable que es hoy continuada y caminada por muchos.
En nuestro barrio, la FUNDACION DR ESTEBAN MARADONA ubicada en Cordoba y Olleros siguen su ruta, su camino alojando a sus coprovincianos que llegan de su Formosa natal para atenderse en los lugares más especializados de la salud y entretanto, les aseguran un lugar donde alimentarse y en donde dormir.
No por otra causa sino por ésta es que continuamente la FUNDACIÓN MARADONA necesita la ayuda en alimentos, colchones y en atención.
El medico Dios es parte fundamental de una forma de ser consecuente con el juramento hipocrático. Tan fundamental como lo fue el recordado DR. FAVALORO, quien como médico rural iba montado en un burrito para hacerles saber ahí en los ranchitos, que para terminar con la diarrea infantil había que hervir la leche.
Tan fundamental como el DR. RAMÓN CARRILLO quien dejó los apoltronados sillones del Ministerio de salud y él mismo fue a fumigar los ranchitos en los lugares para paliar el mal de Chagas, que llevó el tren sanitario por el cual los no tenidos en cuenta porque no es rentable no conocían al odontólogo, las vacunas y demás.
A pocos días de un comienzo de un nuevo año estos fundamentos sigue vigentes que el fundamento de una práctica que no habla de sus propias necesidades sino que se pone al servicio de las necesidades del igual, del hermano enfermo que necesita ayuda y atención. Que no dice sino que hace, que no promete sino que realiza.
Concluyendo, nuestro más sentido homenaje a este GRAN MEDICO, EL DR. ESTEBAN LAUREANO MARADONA, quien recibió de los nativos el mejor sentimiento y reconocimiento: EL MEDICO DIOS.
Publicado 30.12.2017