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El mirador de la emblemática Torre Monumental de Retiro reabrió sus puertas tras un periodo de reformas llevadas a cabo por la Ciudad. Jorge Macri, el Jefe de Gobierno, destacó la relevancia cultural y recreativa de Buenos Aires durante la ceremonia de reapertura, enfatizando que «nuestra identidad cultural nos llena de orgullo y nos define».
Conocida popularmente como la Torre de los Ingleses o Torre del Reloj, este majestuoso edificio ha sido un testigo del crecimiento urbano de la ciudad. Su ubicación privilegiada, frente a las terminales de trenes de Retiro y el antiguo Hotel de los Inmigrantes, la convierte en un punto de encuentro significativo para turistas y residentes. La reciente renovación del mirador, situado en el sexto piso, permite a los visitantes disfrutar nuevamente de la espectacular vista panorámica que ofrece.
El Jefe de Gobierno, acompañado por su esposa María Belén Ludueña y el director general de Patrimonio, Museos y Casco Histórico, Pedro Aparicio, subió al mirador a 40 metros de altura para celebrar la apertura en el Día del Respeto a la Diversidad Cultural. En sus palabras, Macri resaltó la singularidad del mirador: «Invitamos a todos a visitarlo. La Ciudad tiene una oferta increíble de actividades recreativas, y por eso nos comprometimos a recuperar la Torre Monumental. Estas obras eran fundamentales para poder reabrirla».
La Torre Monumental, que cuenta con siete pisos y fue donada por residentes británicos en conmemoración del Centenario del primer Gobierno Patrio, se alza en la Plaza Fuerza Aérea Argentina. Inaugurada el 24 de mayo de 1916 y diseñada por el arquitecto Ambrose Macdonald Poynter, la torre combina ladrillos rojos y piedra labrada, alcanzando una altura de 60 metros. Durante los trabajos de restauración, se repararon el reloj y el ascensor, ambos fuera de servicio, además de realizar mejoras estructurales y una actualización completa del sistema eléctrico.
Desde la cima, los visitantes pueden deleitarse con vistas que abarcan la Plaza San Martín, el edificio Kavanagh, el Hotel Sheraton, la Reserva Ecológica, el Río de la Plata y el Puerto Nuevo, entre otros paisajes emblemáticos de la ciudad.
El séptimo piso alberga el reloj que da nombre a la torre. Este reloj cuenta con cuatro cuadrantes de opalina de 4,40 metros de diámetro, un péndulo de más de 4 metros y un peso de 100 kilogramos. Fabricado en 1914 por la relojería Gillett & Johnston de Croydon, Inglaterra, es una réplica en menor escala del famoso Big Ben de Londres.
Los interesados en visitar el mirador pueden hacerlo todos los días de la semana: de lunes a viernes de 10 a 15 horas, y los sábados, domingos y feriados de 10 a 18 horas. Las tarifas de entrada son de $750 para residentes argentinos y $4.500 para no residentes. Sin embargo, la entrada es gratuita para jubilados, estudiantes universitarios, personas con discapacidad, menores de 12 años y grupos de estudiantes de colegios públicos. Los miércoles, el acceso es completamente libre. Las reservas para visitar la Torre Monumental se pueden realizar a través de la plataforma EntradasBA.
Este renovado espacio no solo enriquece la oferta cultural de Buenos Aires, sino que también refuerza el sentido de pertenencia de sus habitantes hacia este importante símbolo de la ciudad.
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Foto: buenos aires.gob.ar
