El arquitecto Jorge Boullosa por seguro uno de los más preclaros historiadores del quehacer porteño en libro imperdible texto “El Bajo Colegiales y sus alrededores”, quien fuera prologado varios de sus libros por el Maestro Don Diego del Pino, al escribir el mencionado texto arrojaba luz sobre uno de los aspectos fundamentales de la historia ya que ésta debe ser un proceso dinámico que adopta los hechos del pasado como un todo y no por meras parcialidades que pueden aportar cosas pero no hacen a las necesidades generales.
La seriedad de su historiografía y en particular el “Bajo Colegiales…” también arroja luz, nos ilumina sobre dos auténticos pioneros como lo fueron Agustín Comastri y Francisco Bollini. Separar ambos pioneros significa tener, incluso, una visión algo tuerta de los hechos que nos precedieron.
Ambos vivieron un momento histórico común; ambos aportaron lo suyo para que una de las etapas del urbanismo barrial resultare necesario y dos personalidades de su incuestionable valía, nos ofreciera su alegato del mismo modo que lo hicieron Lezica, Lezama y tantos otros que en aquel Buenos Aires del Siglo XIX ofrecieron sus quintas para dar su fisonomía a nuestro barrio.
Precisamente el gran aporte del Arquitecto Boullosa analiza la historia de este sector que fuera parte de los quintales de Don Francisco. La historia, como hemos dicho, es un proceso dinámico y no gélido; es una visión del conjunto que toma las distintas etapas como un conjunto.
2 – UNA MIRADA AMBIENTAL
La entrega de las eco-bolsas para las compras va a dar en el blanco de una de las más prioritarias necesidades de los barrios, la ciudad, el país y la vida en general porque va en la solución o terminación en la infamia de los rellenos sanitarios y en este sentido, mejorará la calidad de vida de los vecinos.
Es de suyo suponer que la utilización de las antiguas bolsas de compras con su dificultad de degradación imponía severos contrastes a la vida animal y a los hombres como parte de este reino. Ahora, luego de este enorme logro que irá en beneficio de todos, habría que estudiar la posibilidad cierta y aplicable para que las empresas entreguen sus ventas a domicilio y luego retiren el envoltorio para usarlo en una nueva operación. De hacerlo, también se avanzaría en beneficio del cuidado ambiental.
Habría que estudiar esa posibilidad pero también es cierto, la necesidad de un debate amplio en donde todos tengan la posibilidad de brindar sus pareceres. Es de esperar además que ese debate no quede trunco dado los intereses sectoriales y/o partidocráticos, algo que se da a menudo en la cotidianeidad de la Ciudad.
Haga quien lo hciere lo importante es abrir las compuertas de las ideas para una ciudad merecedora de una calidad de vida en la que ya se avanzó con el tema de las ecobolsas repartidas ahora por los hiper o supermercados.
¿Qué es un negoción de algunos? Esa idea sólo demuestra un pensamiento estrecho e incluso una mala intención. Si no se comparte alguna medida, algo que es razonable no compartirla lo mínimo exigible es una constraposición de una idea mejor y no caer en el petardismo acostumbrado e inconducente.
Sintetizando, la mirada ambiental viene hoy a dar su aporte como una suerte de denominador común y tal vez como una visión que avance en términos de una visión más global en el paso de la especie humana sobre la tierra.
Tal vez esa mirada ambiental sea producto de la filosofía del amor que es parte de la tradición judeo-cristiana en momentos en contraposición de pensamientos gemelos que dicen enfrentarse pero que en esencia no proponen nada nuevo en momentos en que se libra la gran batalla en el marco de la tercera guerra mundial como lo afirma Su Santidad, nuestro Pancho Bergoglio o Francisco I.
Es de esperar una mirada no egoísta, no idolatrada, más democrática y menos interesada en el marco de privilegiar las necesidades comunes. Esperamos que ese debate sea dado y pensamientos que la entrega de las bolsas para las compras es una propuesta superadora.
Hola, una consulta, donde podría llegar a conseguir un ejemplar de ese libro? Muchas gracias desde ya.
Intentá en las buenas librerías del barrio que puede ser posible. También y no creo que el Museo Fotográfico de Alejandro Simik en Lacroze y Fraga lo tengan a la venta, pero tendrán mayores precisiones que nosotros al respecto. Seguramente podrás encontrarlo en las Bibliotecas para su consulta. Es lo que podemos informarte y desde ya agradecemos que nos hayas escrito.