“El Centro Verde funcionará en un predio ubicado entre Hornos, Río Cuarto, Herrera y Osvaldo Cruz, en Barracas. Son 2.460 metros cuadrados divididos en cuatro galpones , con una playa de maniobra común en el centro. La cooperativa El Amanecer de los Cartoneros (MTE) se encarga de la logística y coordinan el trabajo de unos 400 recuperadores urbanos (los cartoneros que se fueron registrando en la cooperativa)”, inicia la información el portal clarín.com el día 10 de junio de 2012.
El tema del medio ambiente esta llamado a ser el que fundamente el derrotero de un siglo el cual debe saldar los errores de los anteriores pero que, además, tiene que ver con el avance del pensamiento humanístico congelado desde el Siglo XIX; pensamientos que no han tenido demasiados avances ni criterios novedosos sólidos desde entonces.
Qué hacer con los desperdicios domiciliarios integra una parte no sabemos si esencial pero por lo menos de importancia imprescindible dentro de los grandes temas de las ciudades.
Pero y al mismo tiempo, obliga a las distintas administraciones tanto sea municipales como provinciales a fijar una agenda común entrelazándola con otras instancias institucionales.
En la ciudad de Buenos Aires el lunes 11 de junio de 2012 comienza una etapa nueva que esperamos marche por el andarivel aconsejable.
“Con capacidad para procesar 500 toneladas de material reciclable por mes, avanza sobre una deuda pendiente para la gestión macrista: el cumplimiento de la Ley Basura Cero, uno de los ejes de disputa con Provincia y Nación”, agrega la fuente más arriba mencionada, “…El Centro Verde funcionará en un predio ubicado entre Hornos, Río Cuarto, Herrera y Osvaldo Cruz, en Barracas. Son 2.460 metros cuadrados divididos en cuatro galpones , con una playa de maniobra común en el centro. La cooperativa El Amanecer de los Cartoneros (MTE) se encarga de la logística y coordinan el trabajo de unos 400 recuperadores urbanos (los cartoneros que se fueron registrando en la cooperativa)”
Si existe una tarea imprescindible en el orden sanitario, urbanístico, social y laboral, ése es el trabajo del Recuperador Urbano porque sin su auxilio la ciudad colapsaría: las empresas recolectoras no pueden dar abasto para recoger la cantidad de toneladas que produce el territorio porteño.
Luego de la debacle del neoliberalismo cuyas etapas anteriores fue Martínez de Hoz (que designó a Videla como Presidente dela Nación) y de Domingo Cavallo (que designó a Carlos Menem) más el inoperante desgobierno dela Alianzay del Dr. Dela Rúa, comenzó a visualizarse en las grandes urbes porteñas familias enteras recogiendo por las calles cartones, bronces y demás como producto del desquicio social que habían producido aquellas medidas que empujaron a los argentinos hacia una marginación nunca antes vista.
Así como producto del derrumbe financiero en el año 2003 se debieron cambiar lo que se había hecho en el proceso 1975 – 2001 donde los gobiernos sucesivos, de una u otra manera, habían plasmado aquella expresión de facto (“Da lo mismo la industria pesada que fabricar caramelos”, decía uno de los patrocinadores de los grupos económicos triunfantes dentro de los años antes mencionados).
Así nacieron los cartoneros como en algún caso despectivamente se los llamó; así nacieron los piqueteros, uno y todos producto de la crisis de un país que se olvidó de ser.
Y poco a poco el nacimiento de esta practica social se fue dando e incluso ganándose el respeto de los demás actores sociales.
“En Barracas, Lionel Robles espera al lado de la balanza. Pertenece a la cooperativa El Pueblito, que cada mes compra 350 mil kilos de basura reciclable para venderla a las empresas que se dedican a recuperarla. “Antes lo hacíamos en la sede de la cooperativa, en Pompeya. Trabajábamos a la intemperie. Recibimos los bolsones, dividimos por mercadería y le damos una zarandeada, porque algo de mugre o agua queda”, cuenta. El papel blanco ocupa el primer lugar entre los elementos que se recuperan, y es el que mejor cotiza. Siguen el cartón, los plásticos, los metales y los vidrios. En promedio los recuperadores sacan dos bolsones (unos 150 kilos cada uno) por día. Y por mes juntan entre $ 3.000 y $ 6.000. Depende de los “clientes”, como llaman a los generadores de desperdicios (bancos, empresas, oficinas, viviendas)”
Lo que es importante mencionar que desde hace un tiempo se ha comenzado a redefinir, a organizar un trabajo imprescindible y necesario de realizar, el de los Recuperadores Urbanos.
La Ciudadestá contenerizada en un 40%. “A fin de año vamos a llegar al 82%, y en marzo de 2013 al 100%. Serán 25 mil contenedores”, promete Santilli. Entonces los esfuerzos apuntarán a lograr que los vecinos hagan el trabajo “puertas adentro”. Primero, separar papel, cartón, plástico y vidrios del resto de la basura. Y luego, tomarse el trabajo de caminar hasta el contenedor más cercano. La organización permite mejorar el sistema de control. En la recorrida aparece una bolsa de Cliba fuera de lugar, una alfombra frente a la cortina de un comercio, otra bolsa que dejó la gente de Indaltec S.A. frente a la plaza Herrera. “Así es más fácil identificar y multar a los que no cumplen con las disposiciones”, sintetiza Santilli.
Concluyendo y como manifestamos en otra página de este mismo portal, es de esperar que se continúe en la elaboración y resolución de los grandes temas detrás de políticas consensuadas entre los distintos niveles institucionales.
Hemos avanzado superlativamente en temas de familia, de derechos sociales e individuales; estamos avanzando en otras temáticas como en transporte porque la misma reunión entre Nación y las autoridades provinciales y municipales de Buenos Aires ya de por si es un avance para destacar.
Y ahora como con la inauguración del primer centro integral en el barrio de Barracas, por seguro estará en sintonía con las grandes medidas de una ciudad, de un país que necesita de tales.
imagen gentileza www.santanaturaleza.blogspot.com