Los puntos seguros encontramos en calles, avenidas, parques, centros de trasbordo, plazas para llamar al 911 ante una emergencia, pulsas el botón y automáticamente contestan desde el Centro de Monitoreo.
“También sirven para alertar por temas de seguridad, un choque, para alguien que se descompone, se siente mal o ve un incendio, o casos de violencia de género, para cualquier tipo de urgencia o emergencia, porque en definitiva el 911 se vincula con todas nuestras herramientas de respuesta, la Policía, el SAME o los Bomberos”, explicó el Jefe de Gobierno.
Los tótems de seguridad funcionan de manera muy sencilla: tienen un botón que, al accionarlo, hace una llamada. Y desde el Centro de Monitoreo el operador puede ver quién se está comunicando mediante una cámara y enviará los móviles correspondientes (patrulleros, ambulancias y/o asistencia de bomberos). Cada Punto Seguro tiene además sirena, baliza de identificación y un intercomunicador antivandálico.
La Ciudad prevé llegar a los 208 tótems para fin de año. Y se suman al programa Parques Seguros con las tareas de repotenciación de la iluminación en diferentes espacios públicos, junto con los patrullajes en motos y cuatriciclos de la Policía para cuidar a los vecinos.
Se aumentó la presencia policial en los barrios porteños, de 18.000 a 20.000 efectivos.