En qué consiste el procedimiento, cuánto cuesta hacerlo y qué patologías se pueden curar.
Tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que declaró ayer la inconstitucionalidad de una disposición que habilitaba el uso público de las células madre de sangre placentaria y cordón umbilical preservadas en bancos privados de células madre, el doctor Claudio Chillik, asesor científico de MaterCell -la empresa que inició junto con un grupo de padres la causa en contra de tal disposición-, dialogó con DoctorVid sobre la polémica que suscita la temática y las dudas más frecuentes en torno a este procedimiento.
-¿Qué tipo de células se conservan en los bancos de células madre?
-En Matercell se conservan las células madre que se encuentran en la sangre del cordón umbilical y la placenta, luego de haberse producido el nacimiento del bebé. Esa sangre normalmente se descarta, junto con la placenta y el cordón umbilical.
-¿Cuánto tiempo hay para recolectar las células madre de cordón umbilical y placenta luego del nacimiento?
-Lo ideal es un tiempo no mayor a 24 o 48 horas, ya que la calidad de las células se va perdiendo a medida que nos alejamos del momento del parto.
-¿Cómo continúa el proceso de guarda de las células madre luego de la recolección?
-Una vez que se corta el cordón umbilical, se hace la recolección con un kit especial que le damos en MaterCell y que lleva la mamá a la sala de parto. La recolección de las células madre la hacemos nosotros mismos. Luego se traslada a temperatura ambiente, desde una clínica cerca de MaterCell o de cualquier parte de la Argentina, en la medida en que no pasen más de 48 horas hasta que llega la muestra al laboratorio. Una vez que llega al laboratorio, se separa la sangre del bebé que tiene células madre –que es lo que nos interesa- y de aquella porción con células madre se hace un concentrado que se coloca a casi 200 grados bajo cero, en nitrógeno líquido, y de esa manera se mantiene. A esa temperatura no hay límite de tiempo para que las células se mantengan en buen estado.
-¿Para qué sirve guardar las células madre de cordón umbilical y de sangre placentaria?
-Hace más de 25 años que se hizo el primer trasplante de médula ósea a partir de células de cordón. Por lo tanto, se considera las células madre de cordón umbilical como la fuente ideal de células madre para trasplante de médula. Esto es muy importante porque el 25% de las personas que necesitan un trasplante de medula ósea no encuentran un donante compatible. En segundo lugar, si se encuentra un donante compatible, hay un alto riesgo de mortalidad por rechazo y además se requiere medicación llamada inmunosupresora –para evitar el rechazo- y esa medicación tiene muchas complicaciones. Por lo tanto, al utilizar las células madre del propio paciente, se asegura una fuente de células madre es 100% compatible con ese chico que está naciendo y no existe ninguna posibilidad de rechazo.
-¿En qué patologías resulta necesario un trasplante de médula ósea?
-Fundamentalmente en patologías oncohematológicas, como linfomas o leucemia. También en otros tipos de cánceres, como los retinoblastomas, que es un tumor del ojo, para el cual se utiliza mucho el trasplante de médula ósea.
Además, hay siete casos de labio leporino en los cuales se utilizaron células madre como parte de la cirugía de la fisura del paladar, como parte de la cirugía, y que forman parte del protocolo que estamos realizando junto con el doctor Guillermo Trigo.
-¿Es decir que esta última aplicación que menciona se encuentra en fase experimental?
-Exacto, pero con resultados tremendamente alentadores. También hay un protocolo de investigación de uso de células madre con niños que nacen con parálisis cerebral; este es un estudio que se está realizando en Estados Unidos y tres chiquitos que tenían guardadas las células en MaterCell fueron a Estados Unidos y ahí le colocaron las células como parte de este estudio. Y la cantidad de indicaciones de uso de las células madre va aumentando todos los días: para enfermedades neurológicas, en traumatología –para regeneración de cartílagos-, en cardiología –para regeneración de zonas del corazón infartadas-.
-De todos modos, estas indicaciones se encuentran aún bajo investigación. Es decir que quienes acceden a este tipo de tratamientos lo hacen firmando un consentimiento y sabiendo que forman parte de un ensayo científico. ¿Es así?
-Sí. Se realizan como fase de experimentación o también como parte de tratamientos que no están en fase de experimentación y que no necesariamente entran en un protocolo.
-¿Por ahora en nuestro país el único tratamiento con células madre aprobado es aquel vinculado con el trasplante de médula ósea?
-Sí. Las otras aplicaciones todavía son experimentales. MaterCell no utiliza células madre de cordón, sino que lo único que hacemos es almacenarlas. No hacemos tratamientos.
-En caso de que las células madre conservadas en el banco resulten necesarias para realizar un tratamiento al hermano del bebé del cual se sustrajeron ¿qué porcentaje de chances de compatibilidad existe?
-Hay un 50% de chances de que sea compatible con un hermano.
-¿Cuántas familias deciden guardar las células madre de cordón y sangre placentaria?
-Nosotros tenemos guardadas alrededor de 23.000 muestras en MaterCell. El número ha crecido en los últimos años porque cada vez aparecen más aplicaciones de las células madre. Además, el hecho de que hoy no esté demostrada la utilidad de ciertas indicaciones no quiere decir que no existirán el día de mañana. Se está guardando hoy las células madre ante la eventualidad de que un hijo las necesite el día de mañana. Una de las teorías sobre las aplicaciones de las células madre es para tratar la diabetes y eso todavía no está demostrado, pero por ahí de aquí a cinco años sí se demuestra y por lo tanto dentro de cinco años puede utilizarlas para eso. Por lo tanto, es imposible saber todo el abanico de usos que van a existir a medida que el niño vaya creciendo, desarrollándose y contrayendo enfermedades.
-¿Qué porcentaje de esas 23.000 muestras que ustedes guardan fueron utilizadas para algún tratamiento?
-Muy pocas. Por suerte, menos del 1%. Porque esto es como un seguro biológico que hacen los padres y lo mejor que puede pasarles es no necesitar usarlas. Pero también, a medida que los chicos van creciendo, están expuestos a diferentes enfermedades, por lo que en bancos con un poco más de antigüedad que el nuestro en Estados Unidos se ve que a partir del octavo o noveno año aumenta el uso de las células conservadas porque los chiquitos empiezan a desarrollar enfermedades que pueden beneficiarse con el uso de células madre.
-¿Qué proporción de las células que ustedes conservan les fueron solicitadas para uso público?
-Ninguna porque justamente eso es totalmente inconstitucional. Si uno conservó células para uno mismo, nadie puede obligarlo a donarlas. Ni bien salió el decreto del Incucai en 2009 se presentaron numerosos recursos de amparo de padres que la Justicia enseguida le hizo lugar. Lo que pasa es que el Incucai permanentemente apeló y por eso se llegó a la Corte Suprema. La resolución del Incucai era robarle a los papás las células madre que habían decidido guardar para sus hijos y para lo cual pagaron. Nadie puede obligarlos a donarlas porque la Ley de Donación de Tejidos y órganos de nuestro país establece que es un acto voluntario.
-¿Cuánto cuesta guardar las células madre de cordón o de sangre placentaria?
-Alrededor de 15.000 pesos todo el proceso y, a partir del segundo año de guarda, se abonan unos 1.300 pesos por año.
Extraido texto e imagen de Dr. Vid
Suplemento de www.infonews.com del 8 / 5 /2014