Hoy la llamé por teléfono a Beatriz a quien con toda justicia podría llamarla el ALMA MATER de La Chacrita de los Colegiales.
Sinceramente, la llamé temeroso, dolido y preocupado, también asustado pensando lo irremediable y que, de ser así, me hubiese causado un indescriptible y profundo dolor.
Quizás con toda justicia podríamos decir que Beatriz -también lo fue Paco Baieli, su esposo- ambos sinónimos de La Chacrita, si allá por aquellos años 1986 cuando por primera vez nuestro periódico -en ese entonces con formato revista- veía la luz en nuestro barrio.
¡Cuántos recuerdos posteriores a la conversación!
El Pelado Jorge Pinasco y su esposa Marilú, Oscar Pinasco y su hermano con su bonita familia. El Padre Osvaldo Musto, Carlitos Funes, Juan Manuel Maccione, Juan Carlos Cersósimo, el Gordo -como le decíamos entonces con cariño- a Carlitos Milanesi. ¡Cuantos recuerdos!
Algunos ya no están, otros ya nos hemos vuelto más viejitos, peinando canas del poco pelo que ya nos queda.
Quien escribe ahora ya tiene 61 años pero no la agilidad, no la de entonces..
El Coco Bugero y sus infaltables letras de tango, autor de «Cuando Caigan las Hojas», o su «Mis Ocho Esquinas»
Cuantos años han pasado desde entonces.
Luego de tener la charla telefónica con Beatriz me dije:
– Tengo que escribirle una nota de homenaje a ella y a Paco.
Pero además: a la historia del barrio de Colegiales como fueron todos los nombrados. A Hugo Alemanno y a Carlitos Caron, al Poeta Enrique Banchs que vivió en Delgado 835, al Coco Baldini y a tantos, pero tantos otros que lamentablemente mis 61 años y la carencia de la memoria y el tiempo me juegan una mala pasada.
Para finalizar, quiero que sea un homenaje y un sentimiento cariñoso a todos ellos.
– GRACIAS POR HABERNOS CONCEDIDO SU AMISTAD. GRACIAS POR SER COMO SON Y COMO FUERON.
CONTINUARA.