
Un grande, fundador de la Patria que está y sigue creciendo en el amor y respeto del pueblo: el General Don Martín Miguel de Guemes. Hijo de una acaudalada familia, su padre Gabriel de Guemes Montero y su madre María Magdalena Goyechea y la Corte, jujeña (ascendencia española portuguesa y Güemes Montero, su padre era español. Nacido Güemes un 8 de Febrero de 1785. Martín Miguel de Güemes comandó a las milicias rurales salteñas, articuladas con las guerrillas que operaban en el Alto Perú, y tuvieron un rol protagónico en la estrategia del gobierno para contener el avance realista hacia Tucumán y volcar sus esfuerzos en la organización del Ejército de los Andes para llevar a adelante la campaña a Chile y Perú. Sus acciones, en coordinación con las del General José de San Martín, facilitaron el cruce de Los Andes para desarrollar con éxito la campaña libertadora.
Su figura fue clave para nuestra Independencia.
Entre ellas destacamos:
El 7 de noviembre de 1810, la División de Salta al mando de Güemes triunfó en Suipacha. Después, fue enviado a Potosí, preparando el avance del Ejército Auxiliar al mando de Castelli y Balcarce. En 1814, a cargo de la defensa de la línea del río Pasaje, por orden de San Martín, hostilizó a Joaquín de la Pezuela obligándolo a retirarse. Así impidió el avance de los realistas hacia Buenos Aires. El 14 de abril de 1815, triunfó en Puesto del Marqués. Fue una de las principales victorias del general y sus gauchos. El 6 de mayo de 1815 fue electo gobernador de la Intendencia de Salta por el pueblo y el Cabildo. En febrero de 1816, el Partido de Atacama (Chile) solicitó protección y Güemes lo incorporó a la Provincia de Salta. Envió enviando allí a un Delegado de Gobierno. Salta tuvo salida al mar por dicho Partido. El 15 de junio de 1816 el Director Supremo le ordenó defender la integridad de las Provincias Unidas y la seguridad del Ejército Auxiliar, que había sido enviado a Tucumán. Rechazó violentas invasiones como las de José de La Serna (1817, fue ascendido y premiado por ello); Pedro Antonio de Olañeta (1817), José de Canterac en 1819, y Juan Ramírez Orozco en 1820, entre otras. En junio de 1820, San Martín lo nombró General en Jefe del Ejército de Observación que debía marchar por el Alto Perú en auxilio la campaña sanmartiniana. No pudo cumplir la misión.